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El tejido muscular esquelético es controlado voluntariamente por el sistema nervioso, es decir, se puede contraer y relajar de modo consciente. Para ello, localizamos más de 600 músculos, siendo el tejido más abundante y constituyendo alrededor del 40-45% del peso corporal. Si queremos que los músculos se muevan deben trabajar juntos. Vamos a verlo en la siguiente entrada.
Los músculos agonistas y antagonistas [Entrenamiento personalizado]
La mayoría de los músculos de las extremidades y del tronco trabajan en parejas en oposición. Esto quiere decir que cuando un músculo realiza un movimiento, existe otro que actúa opuestamente. Así podemos diferenciar dos tipos de músculos:
Músculos agonistas: músculo que inicia el movimiento, es decir, participa en la generación del movimiento. Por ejemplo, en un curl de bíceps sería el bíceps braquial.
Músculos antagonistas: músculo opuesto al agonista, que se estira mientras el otro se ha acortado. Por ejemplo, en un curl de bíceps sería el tríceps braquial.
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Imagen 1. Ejemplo de músculos agonistas y antagonistas en una flexión de codo. |
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