¿Para qué evaluar? ¿Qué
objetivos tiene la evaluación del lenguaje? En la siguiente entrada vamos a
continuar ampliando una serie de Principios Básicos, en una nueva entrada de la materia sobre Evaluación y Diagnóstico de la Audición y
Lenguaje correspondiente a nuestra temática de Mención de AL.
Objetivos de la evaluación del lenguaje [Evaluación y Diagnóstico de
la Audición y el Lenguaje]
El profesor centra su interés en averiguar
las fortalezas y debilidades del sistema lingüístico del niño considerado una
serie de factores: biológicos, madurativos, sociales y educativos.
Como docentes debemos considerar
la particularidad del alumnado, por lo que nos debemos plantear la evaluación como un
proceso individual y más cuando los niños y niñas llegan al sistema educativo
cada vez con mayores descompensaciones en sus capacidades lingüísticas y
recursos presentando tanto un vocabulario como unas estructuras muy simples.
También muchos de estos niños con
dificultades del lenguaje pueden presentar problemas para entender lo que se les pide
en los procesos de enseñanza-aprendizaje con su correspondiente dificultad en
la compresión de contenidos del currículum. Por ello, participan menos en el
aula e incluso en sus interacciones con adultos y compañeros.
Desde hace años, se ha prestado
una mayor sensibilización hacia este alumnado, sobre todo a las consecuencias sociales y
escolares de los problemas del lenguaje, realizando los docentes esfuerzos para
atenderlos.
Con la evaluación del lenguaje se busca
establecer el nivel de competencia lingüístico de un niño junto a otros
aspectos como su dominio del lenguaje, capacidad de articulación y nivel de
desarrollo. Además, debemos determinar sus capacidades anatómicas y
funcionales, el dominio de las dimensiones del lenguaje (forma, contenido y
uso) y el proceso seguido en su aprendizaje lingüístico.
Cuando se establezca el nivel de competencia se podrá saber la
gravedad de la alteración o la conducta a intervenir, delimitar qué alumnos van
a necesitar una evaluación más completa o si se debe derivar a profesionales.
Actualmente, los problemas del lenguaje y comunicación entendidos se
consideran como necesidades educativas, ya que la
mayor parte de ellos se manifiestan e incluso llegan a intensificarse en la
situación de enseñanza y aprendizaje.
La evaluación puede servir también para saber el nivel de
desarrollo del lenguaje de una clase o grupo para poder establecer luego programas
de diferentes tipos: programa preventivo, programa de intervención general,
programa específico de estimulación o enseñanza del lenguaje, etc.
Podemos concluir que la finalidad de la evaluación del lenguaje se
situaría en una doble dimensión:
- Primero, cómo realizar en el contexto de aula u hogar la observación y muestras del lenguaje. Para ello deben participar diferentes personas en actividades sociales.
- Segundo, cómo aprovechar las situaciones de enseñanza y aprendizaje del aula para realizar una evaluación más dinámica que permita analizar la distancia entre la zona de desarrollo actual y próximo. Para ello se aportan indicaciones sobre cómo utilizar los apoyos acordes a las necesidades del alumnado.
Ambas dimensiones son complementarias y se realizarán mediante un trabajo
colaborativo entre el profesorado y diferentes profesionales (profesionales de
la comunicación y el lenguaje, del trabajo social, psicólogos y pedagogos).
Imagen. La evaluación del lenguaje sirve para saber el nivel de desarrollo del mismo y posibles dificultades.
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