Anteriormente se abordó Wilhelm Wundt y sus inicios en
Heidelberg (Alemania), sus primeras influencias y el proceso de la inferencia
consciente, junto a los fundamentos de su psicología. A continuación
continuamos con su plan de psicología, la cual estructuraba en una serie de
niveles. Hoy traemos una nueva entrada de historia
de la Psicología.
Plan de la Psicología según Wilhelm Wundt
[Historia de la Psicología]
Wundt propuso un plan de
psicología, una formulación alternativa a las leyes lógicas
propuestas en Heidelberg. Consistía en una estructura psíquica con cuatro
niveles.
1. Elementos psíquicos (simples). Constituido por sensaciones (producidas por el mundo
externo u objetivo) y los sentimientos (espacio subjetivo y experiencias
internas). Ambos se pueden estimar de forma cuantitativa (relativa a su
intensidad) y cualitativa (definido por su naturaleza).
Es relevante su teoría
tridimensional del sentimiento, un análisis cualitativo que permite
representar los sentimientos en un espacio de configuración tridimensional por
tres ejes:
- Dimensión agrado-desagrado.
- Condición fisiológica excitación-calma.
- Condición psicológica de tensión-relajación voluntaria.
Este modelo es muy influyente y controvertido,
al no ser concluyentes los resultados experimentales.
2. Formaciones psíquicas. Síntesis de anteriores
elementos. Se destacan dos tipos:
- Representaciones o ideas: se componen principalmente de sensaciones y se dividen en intensivas, espaciales y temporales.
- Afectos: se componen de sentimientos. Se dividen en impulsos, emociones y procesos volitivos.
No son fenómenos de conciencia discretas ni
estáticas. Muestran transformación, fluir y unidad de la conciencia.
3. Conexiones psíquicas. Es más que la suma de
sus elementos o partes. Obedecen a tres principios
de causalidad psíquica:
- Resultantes o síntesis creadora: un contenido es cualitativamente superior a la suma de los elementos de sus atributos.
- Relaciones psíquicas: el significado de un contenido depende de sus relaciones con otros elementos.
- Contrastes: la oposición entre contenidos provoca que estos se refuercen mutuamente.
De estos principios se derivan tres leyes:
- Crecimiento mental: propone la integración progresiva desde formas simples a más elaboradas.
- Heterogeneidad de los fines: se producen nuevos fines a partir de los perseguidos o alcanzados.
- Desarrollo hacia los antagonistas: define fenómenos mentales e incluso histórico-culturales que oscilan entre alternativas.
Al margen de estas leyes, había dos
aspectos muy importantes en el sistema mental de Wundt, asociados a la “causalidad psíquica” contrarias a los
largo del tiempo.
- Era una causalidad diferente a la del mundo físico, al tener carácter teológico, y dirigida a fines o metas sin necesidad de determinantes fisiológicos o respuestas reactivas a condiciones ambientales. Para James y Brentano, el sistema de Wundt supone que la conciencia y procesos mentales humanos tienden hacia algo siempre. Este sistema se considera voluntarista porque no comprendía solo una elección racional y reflexiva, y afectaba a toda forma de deseo, tendencia y motivaciones inherentes.
- Conectaba y relacionaba las “formaciones psíquicas” conformando la apercepción, una síntesis y experiencia plena de la conciencia. La apercepción es un término de la psicología de Herbart y filosofía de Leibniz, que remarca el carácter unificado, focalizado y creativo de la actividad y experiencia mental. Implicaba una voluntad activa del sujeto para elegir entre contenidos mentales y componer síntesis superiores.
- Por otro lado, Wundt reconoce un segundo tipo de apercepción, la apercepción activa, que compone síntesis de forma pasiva y asociativa y atribuida a procesos mentales superiores, intencionales y propios del ser humano.
Imagen. Wilhelm Wundt.
Bibliografía:
Lafuente, E., Loredo, J.C., Castro, J. y Pizarroso, N. (2017). Historia de la Psicología. Madrid: UNED.
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