¿Qué es el razonamiento?
¿Para qué sirve? En la siguiente entrada iniciamos una nueva temática sobre la
Psicología del Pensamiento comenzando a introducir la Psicología del razonamiento.
Introducción a la
Psicología del razonamiento [Psicología del Pensamiento]
El razonamiento es un proceso cognitivo básico
que nos sirve para utilizar y aplicar nuestro conocimiento. Si no fuésemos
capaces de realizar inferencias dependeríamos de un conocimiento específico y
puntual para cada una de las situaciones que vivimos en el día a día.
Imagínate una situación en donde un padre le
dice a otro que su hijo de nueve años
estudia más que su prima de once, pero menos que su otra hija de siete años. Podríamos
realizar una serie de inferencias:
1. Sus hijos estudian más que su prima.
2. Su hija de siete años es la que más
estudia.
3. La prima es el que menos estudia.
4. La prima es la que tiene mayor edad.
5. La prima es su sobrina.
Estas inferencias se pueden realizar por
cualquier persona sin necesidad de conocer a los protagonistas. Se puede
considerar que el
razonamiento posibilita pasar de una información a otra, debido a
que a partir del conocimiento sobre unos datos relacionados, se pueden obtener
otros e incluso llegar a conclusiones.
Por otro lado, no todas las inferencias son
iguales. Existen algunas que van más allá de lo expresado. Por ejemplo, de la
información anterior podríamos decir que “la prima no estudia nada”.
Las investigaciones sobre el razonamiento
humano acudieron a la lógica buscando un criterio para evaluar el curso de las
inferencias e incluso aspirando a encontrar unas leyes propias del razonamiento
humano. Han diseñado tareas experimentales sobre este proceso de acuerdo con la
formalización y el concepto de validez de análisis lógico.
Estas tareas de razonamiento comprenden una
serie de premisas y conclusiones que deben evaluar los sujetos respecto a su
consecuencia lógica. Los enunciados en los cuales se razona se conocen como premisas.
Por otro lado, se considera una conclusión al enunciado que deriva de las
premisas. Por último, un argumento es el conjunto que está formado por los dos
anteriores (premisas y conclusión).
Si volvemos al ejemplo de los dos hermanos y
la prima, se observa que partiendo de las mismas premisas “Su hijo de nueve años estudia más que su prima de diez, pero menos que
si hija de siete” se pueden lograr diferentes conclusiones. Por ejemplo:
“La hija de siete años es la que más estudia
de los tres” es una inferencia de tipo deductivo. Si la premisa se supone verdadera,
sería un argumento válido o inválido. Las conclusiones se siguen de las
premisas.
“La prima estudia muy poco” es una inferencia
inductiva. Si esta premisa se supone verdadera, sería un argumento más o menos
probable. Las premisas sugieren o apoyan la conclusión.
En siguientes entradas se abordarán leyes de la lógica
para poder evaluar el razonamiento humano.
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