Señales de alerta en el alumnado TEA [Necesidades Educativas Especiales]

Volvemos con la necesidad educativa especial que podemos encontrarnos en nuestras aulas en el día a día conocida como Trastorno del Espectro Autista o TEA. En la siguiente entrada se abordan las señales de alerta pata detectar esta necesidad.

Señales de alerta en el alumnado TEA [Necesidades Educativas Especiales]

Como recordaréis, los niños/as con Trastorno del Espectro Autista o TEA muchas veces han sido considerados como sujetos con Trastorno Generalizado del Desarrollo (TGD) por compartir algunos aspectos comunes, pero los TEA son un grupo muy heterogéneo y, en realidad, su desarrollo no está afectado de manera “generalizada”.

Se encuentran una serie de déficits asociados al TEA desde edades tempranas como en los primeros meses. A modo de ejemplo se mencionan los siguientes:

• No desarrollan conductas no verbales, como por ejemplo el gesto de señalar.
• No responden a peticiones del compañero social.
• No son capaces de mirar a la cara a las personas que le llaman la atención.
• No son reactivos a sonidos de su ambiente.

Por otro lado, para los niños y niñas de 0 a 3 años se observa en la literatura una serie de “señales de alerta”:

• Alteración cualitativa en la comunicación no verbal.
• Ausencia de juego simbólico e imaginación.
• Cualquier pérdida en lenguaje o habilidad social
• Estereotipias o manierismos de manos y dedos.
• Falta de iniciativa en actividades o juego social.
• Falta de utilización social de la mirada.
• Incapaz de compartir placer.
• No balbucea ni hace gestos (señalar, decir adiós con la mano) a los 12 meses.
• No dice palabras sencillas a los 18 meses.
• No dice frases espontáneas de dos palabras (no ecolálicas) a los 24 meses.
• No muestra interés por los compañeros/as de su edad
• No presta atención a las otras personas.
• No respeta la reciprocidad en las actividades de “toma y dame”.
• No responde a las expresiones faciales o sentimientos de los demás.
• No señala objetos para dirigir la atención de otra persona.
• Reacciones inusuales o falta de reacción a estímulos sonoros.
• Retraso o ausencia del habla.

Si aparecen estas señales, deberían suponer una inmediata derivación a un recurso especializado para una evaluación diagnóstica. Además, para asegurar la detección eficaz se debe valorar los parámetros del desarrollo evolutivo del niño/a, comparando los déficits que presente con el patrón de desarrollo normativo.

Imagen. Existen una serie de señales para detectar un niño/a TEA. 

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